El ciclo del agua y de la vida son uno mismo

Por Valentina Heredia

Estimada comunidad Merici, por este medio me gustaría hablarles un poco sobre el agua potable y saneamiento en nuestro país, sobre las consecuencias que tiene su escasez y medidas que podemos tomar para ayudar.

La agenda 2030 es una lista de objetivos de desarrollo sustentable para lograr hasta ese año y justo incluye este punto por el hecho de que el mundo sería mejor si mejoraran estos servicios, ¿Pero por qué?  En este artículo les contaré algunas de las razones y otros datos que podrían interesarles.

El acceso al agua potable y saneamiento es de suma importancia para evitar enfermedades altamente infecciosas que ponen en riesgo la vida de un conjunto de personas. El agua potable nos ayuda a estar sanos y a mantenernos en buen estado. El saneamiento mantiene el agua que usamos diariamente para diferentes actividades limpias. En pocas palabras, estos dos servicios permiten que los ciudadanos de una ciudad vivan una vida digna.

En México, es seguro decir que la cobertura de agua potable es bastante buena ya que cubre alrededor de un 92% de la población, sin embargo, la calidad de ésta es muy mala porque los mantos acuíferos y otros lugares de donde proviene el agua se encuentran sobreexplotados y contaminados debido a su uso agropecuario y exposición a diversos tipos de químicos y pesticidas.

De la misma manera, el sistema de saneamiento y drenaje en México está en muy malas condiciones; cada que llueve, miles de coladeras se tapan provocando que el agua de éstas se desborde y el agua de lluvia se estanque, además ensucia el agua que utilizamos para bañarnos, lavar los platos, lavar nuestra ropa e incluso para beber. Muchos de ustedes podrán pensar, “En donde yo vivo el sistema de agua potable y saneamiento es de muy buena calidad”, si es así, siéntete afortunado ya que la realidad es muy distinta para otras personas.

Alrededor del 10% de la población mexicana no tiene acceso a agua potable, representando mayormente a comunidades rurales y zonas marginadas dentro de grandes ciudades y a las que sí les llega, les llega sucia, con tierra, con toxinas o aguas negras. Los motivos principales de esta falta de calidad de servicios en estas zonas es la gestión financiera inadecuada  ya que las cuotas no alcanzan para el mantenimiento y buen funcionamiento del sistema.

Esta falta de recursos hídricos resulta fatal para la salud de la población ya que causa enfermedades como diarrea, hepatitis, fiebre tifoidea y poliomielitis. Se calcula que al año mueren unas 842 000 personas a causa de enfermedades e infecciones causadas por la insalubridad del agua y calidad de saneamiento. Sin embargo, estas enfermedades y muertes son muy fáciles de prevenir con algunas medidas que expondré a continuación.

Para contrarrestar el daño hecho es necesario que como comunidad cambiemos la forma en la que nos relacionamos con el agua y cómo la aprovechamos y desalojamos:

• En las sociedades rurales es vital no desechar químicos en cuerpos de agua.
• En urbanizaciones y zonas industriales se debe regular la deposición de los desechos de fábricas e imponer una multa a las compañías que violen esta norma.
• Cuidar el uso que le damos al agua y ahorrar lo más que podamos de ella; bañarse en menos de 5 minutos, cerrar la llave cuando no la usas y hasta recoger agua de la lluvia para luego filtrar y usarla para trabajos de casa.
• De igual manera sería buena idea implementar filtros de agua, los cuales son fáciles de construir y usar e igualmente implementar en cualquier tipo de vivienda.

Los filtros de agua limpian de cualquier impureza el agua de la llave y son muy accesibles para todos; desde comprarla en una tienda hasta hacer unos con materiales que seguro se pueden encontrar en cualquier hogar o son muy accesibles en cuestión de precios.